Custodia Compartida


Y Por qué no pensar en una Custodia Compartida para evitar síndrome de Alineación Parental

En Colombia no se ha regulado el tema de una custodia compartida, sin embargo, la misma no está prohibida en nuestra legislación. En diferentes legislaciones de otros países el tema se encuentra ya regulado, permitiendo a los padres igualdad de condiciones frente al cuidado de sus hijos. En nuestro país el tema ha sido trabajo de una manera muy conservadora, en el cual la madre en la mayoría de los casos conserva la custodia, y al padre se le es regulado el tema de visitas y alimentos.

Hoy por hoy vemos a unos padres comprometidos por sus hijos y que en muchos casos quieren obtener la custodia de los mismos, recibiendo en muchos despachos judiciales las negativas a sus pretensiones porque se considera que el menor esta mejor en manos de las madres. 

Pero será esto cierto? Hay que negarle la posibilidad al padre que puede ejercer su paternidad a plenitud?

No podrá este con la crianza de sus hijos?
Muchos padres que han tenido por una u otra circunstancia que criar a sus hijos solos, lo han hecho mas que bien. Será que solo ante la ausencia de la madre, el padre podrá tener la oportunidad de estar en contacto permanente con hijos en nuestro país? . Porque no empezar pensar de manera diferente y abrir la posibilidad de compartir la custodia del menor. Este debe ser el arduo trabajo de los abogados de familia, no solo para demostrarle al juez las ventajas de una custodia en esas condiciones, sino al padre o madre reacia en aceptarla, para convencerlos que podría ser una gran oportunidad para que su hijo no tuviera que lidiar con el duelo de no poder compartir con alguno de ellos. He visto fallos judiciales en donde el padre demuestra que puede garantizar todos los medios para criar en las mejores condiciones a su menor hijo, pero ni aun así le conceden la custodia, debido a que simplemente es el padre, y se considera que el menor va a estar mejor al lado de la madre. El objetivo primordial de la custodia es garantizarle a un menor todos sus derechos, sin importar que padre la este ejerciendo, si ambos padres son excelentes, perfectamente el menor podría estar un tiempo con la madre y otro con el padre. Infortunadamente cuando la custodia es otorgada a uno de los padres, en muchas oportunidades, se cortan los lazos de afecto hacia el otro, incluso llegándose a crear el síndrome de alienación Parental , en donde el menor termina rechazando o hasta odiando al padre o la madre que no vive con el sin saber cuales son las causas reales de ese rechazo hacia su padre o su madre.
El síndrome de alienación parental ya ha sido discutido en otros países y hasta ahora empieza a conocerse en el nuestro, pero no es manejado por los psicólogos clínicos, solo los forenses están en capacidad de descubrir si un menor lo padece. Pero claramente se sabe que es causado por el padre custodio que hace cualquier cantidad de comentarios inapropiados frente a su hijo del padre que no ostenta la custodia, creando en el menor, una imagen desdibujada de su padre o madre. Este tipo de situación puede generar en el menor sentimientos de culpa, dolores de estómago, dolores de cabeza, ansiedad y a futuro depresión, asi que lo recomendable es mantener al margen a los hijos de las disputas que hay entre los padres.

El síndrome de Alienación parental va de la mano con mecanismos de presión ejercidos por el padre custodio para impedir que otro padre pueda ver o compartir con su hijo, por tanto, al tener una custodia compartida se rompería de tajo este fenómeno pudiéndose dar una crianza más
sana para los menores.
En Canadá se está aplicando la custodia compartida, un menor puede vivir 8 días con su padre y 8 días con su madre, el menor tiene en cada hogar todas sus necesidades cubiertas, y puede disfrutar de cada uno de sus padres, en todas y cada una de sus actividades de su vida. Este sistema ha venido funcionando y los menores se han visto ampliamente beneficiados ya que logran empatía con sus progenitores y fortalecen los lazos de amor con los mismos y con sus familias paternas y maternas.
Nuestra constitución propugna por que los menores no sean separados de sus familias, el objetivo es que no se rompan esos lazos de familiaridad, es por esto que debemos avanzar a nuestra realidad social y darle la oportunidad a nuestros niños de crecer al lado de padre y madre la custodia compartida sería la fórmula perfecta para dar cumplimiento a este amparo constitucional.

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